martes, 29 de julio de 2008

EL QUE SUSCRIBE


Guenas y santas; ésta que leen es de puño y letra azí que todo lo que ze diga puede zer usao en mi contra. Por ahora solo quiero saludarlos y dejarles unas cositas para compartir, serán, canciones, poemas recetas, secretos pá embrujar mujeres y otras yerbas. Asi que sin mas gueltas y mientras ensillo el cimarron les dejo un ¡¡¡AIJUNA CANEJO!!!!!!!! Bienvenidos.
Entonces acá vá un poema bien campero de un amigo.
COSAS QUE PASAN. Jose Larralde
Nadie salió a despedirme cuando me fui de la estancia, solamente el ovejero, un perro, cosas que pasan.El asunto, una zonzera, un simple cambio de palabra,y el olvido de un mocoso del que puedo ser su tata. Y yo que no aguanto pulgas a pesar de mi ignorancia ya nomás pedí las cuentas sin importarme de nada.No hubiera pasado esto si el padre no se marchara,pero los patrones mueren y después los hijos mandanhasta parece mentira pero es cosa señalada,que de una sangre pareja salga la cria cambiada.Los treinta años de servicio pa'l mozo no fueron nadase olvidó mil cosas buenas por una que salió mala.Yo me había querenciado, nunca conocí otra casa,y apegado a las costumbres me hallaba en aquella estancia.Si hasta parece mentira, mocoso sin sombra 'e barba,que de guricito andaba prendido de mis bombachas.Por él... por él le quité a unos teros dos pichoncitos, malhaya!.Y otra vez, nunca había bajado un nido,y por él gatié las ramas.Cuiando ya se hizo muchacho, yo le amancé el malacaray se lo entregué de riendas pa' que él solo lo enfrenara.Tenía un lazo trenzado que gané en una domada,pa'l santo se lo obsequié, ya que siempre lo admiraba.Y la única vez que el patrón me pegó una levantadafue por cargarme las culpas que a él le hubieran sido caras.Zonzeras, cosas del campo, la tranquera mal cerraday el terneraje plantel que se sale de las casas,y esto pa'l patrón era cosa delicada.Y bueno, pa' qué acordarse de una época pasada, me dije pa' mis adentros 'todo eso no vale nada'.Sin mirar nos arreglamos; metí en el cinto la plata;le tiré pa' despedirme mi mano, pa' que apretara,y me la dejó... tendida, cosa que yo no esperaba,porque ese mozo no sabe si algún día he de hacerle falta.Tranqueando, me fui hasta el catre, alcé un atado que dejara,y rumbié para el palenque dejandome atrás el ala.Encillé, gané el camino, pegué la última mirada,al monte; al galpón; los bretes; el molino; las aguadas.De arriba abrí la tranquera, eché el pañuelo a la espalda.Por costumbre prendí un negro, talonié mi moro pampa,y ya me largué al galope, chiflando como si nada.Naides salió a despedirme cuando me fui de la estancia,solamente... el ovejero... un perro... cosas que pasan.
Gracias hasta la proxima. El pulpero.

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